Parade
¿Chispa o calambre?”
PARADE llega al rescate con una inigualable nueva dosis de energía, plena de pop de alto voltaje. Si el verano es la época del año propicia para recargar las pilas, Antonio Galvañ nos proporciona con “¿Chispa o calambre?” una revitalizante batería de canciones que, sin duda, permitirá encarar el inicio del nuevo curso de la mejor manera posible. Por muchos motivos vividos en los dos últimos años, hacía falta un disco como este de PARADE, un mini LP en vinilo 12" a 45 R.P.M con siete nuevos temas, que además de mostrarnos al artista en su estado más genuino, diverso, imaginativo y arrebatador, nos enchufe sin contemplaciones a una realidad que hemos de cambiar con la actitud adecuada. Llegados a este punto, sólo hay un dilema posible: ¿Chispa o calambre? Que cada cual elija lo que el cuerpo le pida…
En “¿Chispa o calambre?” nos vamos a encontrar una faceta que, aunque sorprendente, todos los que hayan estado en un concierto de los de Yecla no pueden dejar de identificar: ese último tramo de la actuación donde Antonio y los suyos son abducidos por el espíritu de Sigue Sigue Sputnik, Meteoro o El Aviadro Dro. Donde se mezcla electrónica, humor y pop en canciones con unas letras que pueden hablar de Godzilla y kaijus, de nanobots y conspiraciones mundiales, pero que en el fondo nunca dejan de hablar de ti y de lo que te rodea.
Un mini LP en vinilo 12" y a 45 R.P.M., en edición numerada y en formato físico y su correspondiente edición digital, que como su título indica, es una descarga continua que te levanta del suelo y no te va a dejar soltar la mano del enchufe hasta que no termine la última canción. Comienza con rockabilly electrónico en “Cuando luchan los Kaiju” y termina con “Mi jefe es el Mal” a ritmo de pop acelerado casi 'ramoniano'. Por el camino nos vamos a encontrar homenajes a Devo en “Nano robots” o a la fotógrafa Diane Arbus en “Jack Dracula”. Canciones autobiográficas como “No quiero estudiar” (buen título viniendo de un maestro de escuela) o una versión de las mismísimas Astrogirls, “Avecrem”. El universo de referencias cruzadas al que Galvañ nos tiene acostumbrados, pero a toda velocidad y bañado de guitarras años cincuenta, sintes herrumbrosos y coros subidos de pitch.
¿Es escapista? Puede que lo sea. ¿A quién no le hace falta en estos momentos bailar y cantar a pleno pulmón y olvidarse de la realidad? Es, por encima de todo, Pop. Pop de muchos quilates, rápido y nervioso, con canciones que no pasan de los tres minutos, como debe ser. Lo que sí es PARADE, haciendo música, es bipolar. Desde hace mucho tiempo. “Inteligencia artificial” (2003) empezaba con una balada romántica italiana como “Romance Morlcock” seguida por un trallazo electro rock como “Nickel Chromo”, sin solución de continuidad. En “¿Chispa o calambre?” vuelve a suceder y se confirma, una vez más, que no hay límites estilísticos para Antonio Galvañ, pero nunca deja de ser PARADE. Lo que está claro es que “¿Chispa o calambre?” es el disco que en este momento hacía falta. Chispa o calambre. PARADE.
Las canciones incluidas en “¿Chispa o calambre?” fueon grabadas y arregladas por Antonio Galvañ en Intonarumore durante 2019 y 2020. La mezcla y la masterización la realizó Guille Mostaza en Álamo Shock, con Aitana Luis y Diego Perinetti en la edición de sonido. Guitarras: Eduardo Piqueras. Coros: María Galvañ.
Los responsables de la portada fueron: ilustración de Jordi Bestiola, con diseño gráfico de Jesús Galvañ.
Pero que sea el propio Antonio Galvañ quién nos describa canción a canción “¿Chispa o calambre?”:
"Cuando luchan los Kaiju"
Busqué Rockabilly electrónico y es un género que no existe. No encontré grupos que lo practicaran. Pero eso es "Cuando luchan los Kaiju". Rockabilly electrónico. Meteoro eran rockabilly electrónico. Sigue Sigue Sputnik claramente eran rockabilly electrónico. De ahí bebe la canción. Por supuesto que después sale otra cosa. Esto es PARADE, siempre empiezo intentando copiar algo, pero después todo falla y el resultado está lejos de lo que se pretendía. Pero es totalmente mío.
La canción habla de personas atrapadas en refugios subterráneos mientras en la superficie luchan kaijus, monstruos tipo Godzilla. ¿Qué sentirá este grupo humano encerrado cuando empiecen a sonar golpes y los cimientos crujan? Ese es el tema de "Cuando luchan los kaiju". El miedo, la claustrofobia, estar encerrado y no poder salir. La rabia que da. ¿Te suena de algo?
"Avecrem"
No creo que se pueda utilizar nunca esta canción de las Astrogirls como publicidad de las pastillas de caldo. Es una canción muy sencilla que hice como regalo para una persona hace un tiempo, y que he retomado y vuelto a arreglar, utilizando las guitarras distorsionadas de Edu Piqueras para darle garra y vivacidad a la música. La letra es maravillosa, como todas las de Alfonso Melero.
"Plot Twist"
No tengo reparos en decir que “Plot Twist” es mi canción favorita del disco. Tiene algo que me pone de buen humor. No sé si será el enfoque un poco Novelty y cincuentas, la letra cinéfila o su ritmo trotón. Tiene mucho humor y referencias a grandes clásicos del cine, pero al final es una canción de amor de alguien que tras mucho tiempo sigue sorprendido de que su pareja permanezca junto a él.
"No quiero estudiar"
Esta es la canción autobiográfica del disco. Habla de mí cuando era adolescente. No quería estudiar, solo me apetecía irme a ensayar con el grupo, que además eran mis amigos con los que salía. Se basa totalmente en un loop electrónico e intenta ser hipnótica y obsesiva. Todo lo que se dice es verdad. Después me hice maestro de escuela. Fíjate tú.
"Jack Dracula"
Jack Dracula existió. Era una persona real que saltó a la fama cuando Diane Arbus retrató su cuerpo totalmente tatuado a principios de los sesenta. Cuenta cómo pudo hacer esa foto y de sus ideas e intenciones, que la llevaron a hacer retratos de freaks, travestis y marginados con tanta hondura y honestidad. Intentando clicar la cámara en ese instante de grieta donde la realidad se convierte en fantasía.
"Nano robots"
Juro que esta letra la tenia casi totalmente acabada antes que Miguel Bosé y toda la recua conspiranoica hablaran de los nano robots que te inyectan con la vacuna. Me encantan los robots gigantes, pero ya tenía unas cuantas canciones sobre ellos. ¿Por qué no hablar de los microscópicos? No creo que tarden mucho en ocupar nuestro cuerpo e informarnos sobre nuestros niveles de colesterol en sangre. Serán bienvenidos. Esta canción es la segunda más novelty del disco. Recoge el espíritu festivo de la primerísima nueva ola americana (Devo o B-52’s) y tiene unos coros en el estribillo que son como gusanos en el cerebro. No te dejan en paz hasta que no los cantes las 24 horas del día.
"Mi jefe es el Mal"
Esta canción es la segunda del disco que canto adoptando el punto de vista femenino. En este caso uso el cliché de la secretaria que se enamora de su jefe y de la decepción que le produce saber que éste no era lo que ella esperaba. Este jefe es el absoluto Mal, metido en sectas satánicas y destinado a subyugar a la población mundial a través del chip de su amigo Bill Gates. Algo tendrá que hacer esta muchacha para solucionarlo. Musicalmente, es un intento de hacer una canción de los Intronautas. Aunque, como siempre, algo sale mal y acaba siendo una canción de pop acelerado con coros de Illuminati a punto de sacrificar a una virgen.
Tracklist
- Cuando luchan los Kaiju
- Avecrem
- Plot twist
- No quiero estudiar
- Jack Dracula
- Nano robots
- Mi jefe es el mal