Espíritusanto
Exfuturo
ESPÍRITUSANTO tienen el don de iluminar el camino. Sus canciones, repletas de guitarras, melodía y armonías vocales, producen la energía y la luz necesaria para abrirse paso a través de los paisajes brumosos por los que transitan la mayoría de las veces. Y eso no lo consigue cualquiera sin desviarse del rumbo al "Exfuturo", el destino al que quieren llegar con la brújula de un álbum que señala siempre en dirección POP, en sus confines más allá del shoegaze y el dreampop.
"Exfuturo" es el segundo álbum (primero para Jabalina) de ESPÍRITUSANTO. Un disco elaborado a fuego lento, producido por Alejandro Martínez (Alexanderplatz, Klaus&Kinski), que repite después de la fructífera experiencia en "Caza mayor" EP (Jabalina 2017), con el que el sexteto madrileño dan un paso adelante en su carrera siendo fieles a las señas de identidad que les han distinguido desde sus comienzos, pero profundizando con una cuidada producción en las diversas facetas que caracterizan su variado repertorio.
"Exfuturo" lo integran nueve canciones que de algún modo representa la banda sonora del lugar espacio-temporal al que ESPÍRITUSANTO quieren que lleguemos. Para ello no escatiman esfuerzos, ofreciendo un sinfín de detalles y pistas en unos textos que en ellos siempre tienen una importancia determinante. Se abre de forma infalible con "La clausura". Un tema con el que disipan las dudas desde el principio, señalando con plena determinación la dirección que quieren tomar. Representa la vertiente más contundente y shoegaze de su repertorio con la que, desde el comienzo, destapan el tarro de las esencias. Un muro de sonido infranqueable, que forman guitarras, bases electrónicas y esa mezcla de brillo y mal oscuro que siempre ha caracterizado al grupo, si no fuera por la luz y el halo dreampop que siempre ilumina sus composiciones. "Debe ser un error, es posible que un instante se corrija el error". Referencias y homenaje al Gaspar Noe de “El tiempo lo destruye todo”.
Con "Ítalo-Fitness" reorientan el paso para introducir el primer tema cantado a dúo por Andrés y Elia, tan característico en ESPÍRITUSANTO y en el que muestran su perfecta sintonía vocal, con un estribillo radiante con el que parecen intentar cuadrar el círculo “Ya no sé ni yo, qué es lo que pasó”. Electro-pop luminoso entre unos Chvrches reposados y unos XX multinstrumentales. Conecta con "Virgo", un canción con un ritmo y una estructura muy marcada por las bases, de la que las guitarras tiran desbocadas. Quizá el tema más psicodélico que ha hecho nunca el grupo. Falsos tresillos y guitarras que tejen y desaparecen. Cambios de idea y de forma. Imágenes de una banda trajeada de terciopelo azul tocando para un Dennis Hopper ensimismado.
Un zumbido de sintetizador. Una batería. Y un bajo. Casi sin darnos cuenta llegamos al tercer corte de este vinilo 12", en el que Elia toma la voz cantante guiada por una preciosa melodía de sintetizador que esta vez acompañan las guitarras ¿Quiénes serán “Los amigos de Lola”? Igual los que escuchan a Elia cantar su nueva declaración de intenciones “He decido ser cruel”. Algo nos recuerda a la frase “tampoco ha llovido esta noche todo lo que te queda por salpicarme” (Gracias, Colectivo Unicornio). Por un instante nos vienen la imagen de unos Camera Obscura atravesados por la épica. Qué bien se le dan estos temas a ESPÍRITUSANTO.
"El rayo que no cesa" es una obsesión. La misma que tuvo aquel escritor del 27, o del 36. Aquí no hay sonidos de animales ni fragmentos de películas, sino campanas anunciando una nueva vida y viajes relámpago por el realismo mágico de las Vistillas. Trileros, juegos de manos y amores desbocados. En “El rayo que no cesa” el sexteto madrileño vuelven a poner en evidencia una de las facetas que más destaca en su variado repertorio: las armonías vocales (chico/chica) y los duetos de Andrés y Elia, que se abren paso a través de un potente bosque de guitarras acechando y en el que siempre encuentran el camino hacía la luz ayudados por la producción de Alejandro que la hace brillar más el rayo. El que nos recuerda el momento en que todo se pudo ir a la mierda, pero salió bien.
La cara B de disco comienza con “La nueva ola”. Noches de verano en el acantilado. Autocines atestados de criaturas extrañas, fruto de una juventud extraviada. Amaneceres nada dorados en los que mandan los silencios ante el sonido constante de un ruido industrial. Le sigue “No es real”. Fuera ruido, bienvenidas las guitarras cristalinas. Entre Real Estate y Teenage Fanclub. La canción más pop del disco, para dos temas de poca broma. Salinger y la paternidad. Dormir poco te hará delirar, tener visiones de animales salvajes. Escribir para recordar: “Llega un día en que adviertes que todo es un sueño y sólo las cosas conservadas por escrito tienen alguna posibilidad de ser REALES” (James Salter).
Casi acabando hacen un “Sacrificio”. Tal vez la canción más sorprendente del disco. Otro binomio. Inicio casi krautrock, algo de Metronomy por aquí, algo de Talking Heads por allá y una explosión pop final, digna de un más que prometedor "Exfuturo"... “Un minuto y todo sigue igual, ¿nos tomamos un tiempo o nos destrozamos aún más?”
Para acabar en paz “900 pasos”. El fin, la calma, el resumen. El camino solemne que marcaron Joy Division o Décima Víctima. Las luces de la ciudad que se retira.
ESPÍRITUSANTO son: André Federico (voces y teclado), Jorge López (bajos), Sean Lynam (baterías y programaciones) Elia Maqueda (voces y teclados), Juan Rey (guitarras) y Pablo Hernández (guitarras).
Letras de Andrés Federico, salvo "No es real" escrita por Pablo Hernández y Andrés Federico.
"Exfuturo" fue producido y mezclado por Alejandro Martínez (también teclados y arreglos adicionales), asistido por Antonio Illán en MIA Estudios (Murcia). Se grabó en El Miradoor con Marco A. Velasco y en Madrid con Luis Hernáiz. Masterizado por Arturo Vaquero en Abrigueiro Estudios.
Diseño gráfico: Andrés Federico.
Tracklist
- La clausura
- Ítalo-Fitness
- Virgo
- Los amigos de Lola
- El rayo que no cesa
- La nueva ola
- No es real
- Sacrificio
- 900 pasos