Parade estaba esperando este momento desde hacía tiempo y no sólo porque estemos ante el primer single de vinilo de su ya extensa carrera, sino porque, desde que tuvo conocimiento de la puesta en marcha de colección Jabalina Love Songs, entendió que esta era una buena ocasión para poner a prueba su natural curiosidad. Su deseo de conocer y de explorar casan a la perfección con su manera de vivir la música pop como una forma de diversión, como una continua búsqueda de la emoción y no como una fórmula que haya que repetir hasta el aburrimiento. La paradoja es que lo hace con un single de canciones de no-amor...

Y nada más lejos del astío es lo que le espera al descubridor de las tres canciones que incluye este vinilo 7" de color amarillo traslúcido. Quién esperara un apéndice o epílogo de "Materia oscura", su aclamado sexto álbum, que explotara la veta del éxito se equivocaba. Cuando nosotros seguíamos donde lo dejamos, disfrutando de "No más rocanrol", Parade ya deambulaba "Por la calle de la amargura"... Un pequeño universo de tambores y timbales, de enajenación india y coros a tres voces, en el que sólo hace falta adentrarse para sentir el amargo abrazo de las canciones de no-amor de Parade.

Con los tres temas incluidos en este single, Antonio Galvañ no sólo toma distancia (aparente) con respecto a su pasado más reciente, se aleja sobretodo del pensamiento único del canon anglosajón y se atreve con la canción popular y hasta con el exotismo de la percusión indígena ¿Quiere esto decir que se adentra en terrenos pantanosos... letanías y mantras interminables, experimentación absurda"... ¡No! Nada más lejos de la realidad. Estamos hablando de canciones, porque lo que Parade sabe hacer son canciones. Desde una perspectiva pop, en "Por la calle de la amargura" (primer corte de la cara A) aborda la canción española, eso sí, con pintiparados arreglos a lo Phil Spector, y en "Corazón Sioux" (segundo corte), como si de un musical se tratara, los ritmos tribales, una mezcla imposible (o eso creíamos hasta ahora...) de Bo Diddley, Adam & the Ants y los cantos de los nativos norteamericanos.

Como exige el guión de la serie Jabalina Love Songs, son canciones que tienen que ver con el amor, aunque en este caso sea desde la perspectiva negativa o del desengaño, en definitiva, canciones de no-amor, de desamor, si se prefiere, que culminan en la cara B con una versión de "Maldigo del alto cielo". Una composición con una de las letras más sentidas sobre el dolor producido por el rechazo, obra de la gran dama de la cancion chilena Violeta Parra, que constituye el reverso tenebroso de su universalmente conocido "Gracias a la vida". Si algún nexo de unión hay, que haberlos haylos, con "Materia oscura" están en el tenor de esta canción y en la esencia del pop entendido como diversión de los dos temas de la cara A, que a duras penas llegan a los dos minutos.

Este single se grabó en Intonarumore durante el mes de junio del 2011 y se mezcló en El Sótano (Valencia) por Dani Cardona. La masterización corrió a cargo de Arturo Vaquero y Jahel Piñeiro en los estudios Abrigueiro, en Friol (Lugo). Como en el resto de discos de la colección Jabalina Love Songs, de la cuidada estética y de la preciosa portada se han encargado María Castelló Solbes (ilustración), y Marina Gómez Carruthers (diseño gráfico y maquetación).

01. Por la calle de la amargura
02. Corazón Sioux
03. Maldigo del alto cielo